Disolvente dieléctrico, libre de solventes clorados y CFC. Tiene una tasa de evaporación muy alta y un gran poder de limpieza. Se puede usar, sin causar ningún daño, en componentes electrónicos, tarjetas y chips de computadora, piezas y equipos sensibles, tableros electrónicos y, por supuesto, cualquier otro equipo mecánico o eléctrico. Dada su composición, debe usarse en equipos fuera de servicio.

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